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DIVULGACIÓN: Las gatas tortuga y su compleja genética

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Pandora, gata tortuga
por Marcelo Dos Santos (especial para Axxón)
http://www.marcelodossantos.com.ar

El pasado seis de mayo un auto atropelló y mató a Gandalf, nuestro hermoso gatito más pequeño, que así abandonó este mundo a la tierna edad de seis meses y seis días.

Buscando ahogar el dolor, especialmente de mis hijos menores, alguien nos regaló una gatita de dos meses, desnutrida y convertida en un verdadero criadero de pulgas.

La aceptamos de inmediato. La bautizamos Pandora. La cuidamos, la desparasitamos (por dentro y por fuera), la alimentamos y criamos.

Y ahí anda, bien, gracias. Es una verdadera preciosura que llama la atención de todos quienes la ven.


Persa tortuga arlequín estilo Pandora

Pandora es lo que se llama "gata tricolor" y que se conoce técnicamente como "gatas tortuga".

Crío gatos desde hace más de treinta años, y, como todos los que se han dedicado a eso profesionalmente o por puro placer, conocía desde siempre el extraño fenómeno de los gatos blancos con ojos azules, que siempre son sordos.

Los gatos (y gatas) blancos de ojos azules son siempre sordos (digan lo que digan los que no entienden de genética) por la sencilla razón de que los genes recesivos que determinan el pelaje blanco y los ojos celestes se ubican en el mismo cromosoma y en el locus (ubicación) contiguo al que aloja el gen de la sordera congénita. Para que el gato sea blanco y de ojos azules se necesitan dos de tales genes en el mismo par (es decir que el gato sea homocigota para tal característica). El problema es que si esto es así, también será homocigota para la sordera congénita, porque junto con el blanco y el azul se transmite la sordera.

La injusticia popular llama a las gatas blancas de ojos azules "malas madres" porque normalmente dejan morir de hambre a sus gatitos sin intentar amamantarlos. Fácil es comprender que, al ser sordas, no escuchan el reclamo alimentario de los hijitos.

Para ahondar más en el tema, diremos que la asociación entre el gen W, que enmascara los demás colores y motivos del pelaje, dejando expresarse sólo al blanco puro, y su gen contiguo, comporta, si está presente el gen para ojos azules, una grave degeneración de la cóclea auditiva y una total atrofia del órgano de Corti a nivel del oído interno.

Esta asociación maligna es tan fuerte, que en los gatos blancos que tienen un ojo azul y el otro de cualquier otro color (gatos zarcos) el oído que corresponde al lado del ojo azul está atrofiado, y el gato será sordo de ese oído.

Ya lo sé, alguien dirá que conoce un gato blanco de ojos naranja que es sordo. Es verdad. Tal fenómeno es rarísimo, y no está asociado a la herencia de los genes que describo.

Si alguna vez le ha llamado la atención esta afirmación: "Todos los gatos blancos de ojos azules son sordos", sin duda también ha meditado acerca de la otra: "Todos los gatos de tres colores son hembras". Ambos hechos son ciertos. A lo largo de este artículo trataré de explicar las extrañas y complejas interacciones de genes que, a lo largo de siete mil años, han producido el pelaje de mi pequeña Pandora. Genética del color en los felinos, tal el tema de mi artículo de este número.

Londres, 1871. Crystal Palace, escenario de la primera Exposición Felina de la historia. Grandes faldas y miriñaques, sombrillas lujosas y adustos caballeros británicos de bombín y paraguas recorren lentamente los diversos stands donde los criadores exponen sus mejores productos.

De pronto, una dama señala el stand de los persas y exclama: "¡El gato francés!", que así se conocía a los persas por aquella época.

Si usted hubiese presenciado aquella exposición, no hubiera visto ninguna persa tortuga. No porque no las hubiese, sino porque el standard (el "libro" que dice cómo tiene que ser el gato de una raza en particular y los defectos inadmisibles) no había sido establecido, y los criadores no sabían si los jueces permitirían competir a sus gatas de tres colores. Directamente no las llevaban a las exposiciones.

El standard de los persas fue establecido en 1889, y, tal como se temía, los únicos colores admitidos entonces fueron el blanco, el negro, el azul y el rojo. Las gatas persas tortuga dejaron, pues, de ser persas. Fueron expulsadas de su raza. Se convirtieron en parias genéticos, como los kurdos en Turquía e Irak, los albanokosovares musulmanes en Yugoslavia o los indios quilmes en el imperio incaico.

En 1901, con gran sentido común, los criadores ingleses presionaron para que su patrón nacional de colores, el esquema tabby, fuese aceptado para los persas, y junto con él fueron admitidos de regreso en el standard de su raza los persas humo, chinchilla, bicolores y tortuga. Esto era esencial para la raza, ya que, aparte de en los gatos callejeros (técnicamente conocidos como "europeos"...; sí, el gato callejero pertenece a una raza pura), los persas son la segunda raza donde este esquema es más común.

Mas, preguntará usted: ¿de dónde sale una gata tortuga, persa o no persa?


Preciosa interacción del tortuga más el gen W. Las marcas de esta gata son perfectas

Sonrío, porque esa pregunta es muy sencilla de responder: las tortuga nacen del cruce entre un gato negro y una gata roja, un gato rojo y una gata negra, un macho negro y una hembra tortuga, o un gato rojo y una gata tortuga. Sólo existen esas cuatro posibilidades. Como se verá más abajo, la explicación genética de este asunto no es tan fácil de dar.

Sí es sencillo entender por qué el motivo tortuga existe sólo en las hembras. La respuesta es: se trata de lo que en genética se conoce como un "carácter ligado al sexo". Por dar un ejemplo conocido: la hemofilia existe sólo en los hombres. Las mujeres hemofílicas son abortadas durante la gestación. Esto se debe que el gen responsable de la hemofilia se ubica en el cromosoma X, uno de los genes sexuales (el femenino) o gonosomas, no en uno de los pares comunes (o "autosomas"). Como el gen patológico es recesivo, es decir que el gen normal lo domina y la enfermedad no se expresa, sucede lo siguiente: consideremos que X es el gen femenino normal (los dominantes se escriben en mayúscula y los recesivos en minúsculas), x el gen de la hemofilia e Y es el cromosoma que transmite los genes masculinos. ¿Qué combinaciones son posibles?

  1. XY: será un hombre que posee un cromosoma femenino normal y uno masculino también normal. Será un hombre sano, incapaz, además, de transmitir el gen mutante a la descendencia.
  2. xY: Gen patógeno en x más una Y. Tenemos a un hombre hemofílico (ya que la x no tiene una X que le impida expresarse). Además, transmitirá la x enferma a una parte de sus hijas.
  3. XX: Mujer normal. No transmite la enfermedad.
  4. Xx: Mujer normal heterocigota, pero que transmitirá en gen enfermo a la mitad de sus hijos. El hombre hemofílico es hijo de una de estas mujeres.
  5. xx: Mujer enferma homocigota (los dos x están enfermos). Muere antes de nacer, porque esta condición es incompatible con la vida. Si viviera, sería hemofílica, pero al no nacer, no existen mujeres hemofílicas.


Diluciones de eumelanina y feomelanina debidos a la acción del locus D

Pues bien, el patrón tricolor en los gatos es un caracter ligado al sexo, que se transmite en el cromosoma X.

Para mayor claridad, llamaremos x(t) al gen para el carácter tricolor, X al gen para cualquier otro color, e Y al gen para el color del macho, que nunca es tricolor. Como en el caso de la hemofilia, en que el gen normal dominaba al patológico, aquí el no tricolor domina siempre al tricolor, de modo que el tortuga sólo se expresa bajo la forma x(t)x(t).

Es fácil ver que:

  1. XX será una gata no tricolor,
  2. Xx(t) será una gata no tricolor que transmitirá el gen tricolor al 50% de sus descendientes,
  3. x(t)x(t), gata tricolor que transmite el gen correspondiente a todos sus hijos,
  4. XY es un gato macho que no es tricolor que no transmite la característica tortuga y que...
  5. x(t)Y será un gato macho no tricolor que sí la transmite. He aquí a los gatos rojos o negros que tienen hijas tortuga.

Por cierto que lo anterior es una simplificación: en realidad, ese locus para genes del color, presente, como se ha dicho, en el cromosoma sexual X, no tiene un gen "tricolor". Puede tener un gen rojo o un gen no rojo, y sólo en una gata ambas características pueden estar presentes al mismo tiempo. En rigor, los criadores llaman "tortuga" a las gatas rojas-no rojas, aunque se extiende el término a las gatas que tienen también presente el color blanco, aunque hay un término específico para denominar a éstas.


Una gata rojo-negro sin blanco (tortuga no arlequín)

Como dato curioso, debo decir que el mismo mecanismo que sirve para producir gatas tortuga se verifica en las gatas azul crema, ya que el azul es una dilución (en blanco) del gen negro (uno de los genes "no rojos") y el crema es una dilución del rojo (también en blanco).

La genética del color en los gatos es un proceso muy complejo, que no está determinado por un solo locus ni por un solo gen ni aún por un solo par de cromosomas y que, en beneficio de los curiosos o interesados en este fascinante tema, profundizaremos un poco más. Como podrán deducir de mi explicación, la obtención de un color determinado de gatitos por parte de un criador requiere del hombre un 40% de profundos conocimientos genéticos, un 40% de grandioso arte pictórico (trabajando con los colores de la paleta de Dios) y un 20%, sencillamente, de... suerte, porque la transmisión de un carácter depende muchas veces del azar.

El color básico, el más primitivo y el más salvaje de los gatos (descontando el pelaje leopardo de los gatos de la raza ocicat, que es una raza de diseño, con un pelaje inventado por el hombre) es el que se transmite por el locus A. Este pelaje (y el locus que lo transmite) se llama A por "agutí", porque es el color del roedor sudamericano de ese nombre. El salvaje color del agutí es muy común en todos los mamíferos, particularmente en los roedores y más que en los demás en el conejo, ya que es altamente mimético.


Un agutí en cautividad

La presencia del gen del locus A hace que cada pelo no sea de un solo color, sino surcado por bandas transversales negras y amarillas. La punta de cada pelo es negra. Hay dos tipos de pigmentos dérmicos en el patrón agutí: la eumelanina (en las bandas negras) y la feomelanina (en las amarillas). El locus A puede poseer dos alelos (dos genes para la misma característica pero de diferentes funciones): agutí y no agutí. El primero es dominante sobre el segundo. Si hay dos genes agutí, el gato será agutí. Si hay un agutí y un no agutí, el gato será agutí. La única posibilidad de que el gato no sea agutí es que haya dos alelos recesivos no agutí para ambos locus A.


Un abisinio con patrón agutí. Compárese con la foto anterior

El resultado, si hay un gen dominante en el locus A, será, pues, un agutí, el conocido pelaje atigrado que aquí y en España se llama "gato barcino" (del árabe barsi) cuando está compuesto de rojo y blanco.

¿Ha visto de dónde venían los gatos atigrados?

Los colores del pelo (como los de la piel y los ojos) son producidos por un pigmento producido por ciertas células de la piel, conocida como melanina. La melanina de los gatos puede ser de varios colores, y se deposita (o no) en el pelo en crecimiento.

La melanina responsable del pelo negro se llama eumelanina y puede aparecer en forma de gránulos redondos u ovalados. Si el pelo tiene gránulos redondos de eumelanina será negro o pardo oscuro; si los gránulos son ovales el pelo será pardo claro (rojo) o pardo muy claro. Como el lector supondrá con mucha razón, esta configuración está determinada por genes. Son tres alelos que pueden ocupar el locus B (por "black", negro). Se llaman B, que es dominante respecto a los otros dos y da pelo negro o seal (lacre, un color rojizo que es negro diluido); b (de "brown", marrón) que es recesivo con respecto a B y produce pelajes pardos, chocolate y lilas; y b(l) (de "light brown", marrón claro) que es recesivo contra B y b y que da colores más claros como lila y canela.

La dominancia en el locus B queda estructurada de esta forma: B es dominante con respecto a b y b(l); b, dominante con respecto a b(l) pero recesivo con respeto a B; y, finalmente, el pobre lila o b(l), que es recesivo contra todos los demás. Esto explica la abundancia de los colores más oscuros en relación a los más claros.

Colores densos Colores diluidos

B - D - Negro

B - dd Azul

bb D - Chocolate

bb dd Lila

blbl D - Canela

blbl dd Ciervo

O (O*) D - Rojo

O (O*) dd Crema

Efectos de los genes del locus D

Los gránulos de eumelanina pueden estar distribuidos en forma más densa o más dispersa. La densidad de la coloración está determinada pro los alelos del locus D. Bajo la influencia del gen D, dominante, estarán distribuidos uniformemente y con alta densidad, lo que producirá gatos de color intenso (negro, chocolate, etc.), mientras que si se expresa el recesivo d el animal tendrá los gránulos melánicos en aglomerados heterogéneos, compuestos por gránulos pequeños e irregulares y gránulos grandes, densos y regulares por igual... En estos gatitos, la luz se reflejará de distinta forma: las partes que carecen de pigmento reflejarán la luz blanca, haciendo que el pelaje parezca más claro. A este fenómeno nos referíamos más arriba al mencionar las "diluciones": el azul es una dilución de negro, el crema del rojo, y así al infinito...

Los genes A, B y D son los más fáciles de comprender, en este enrevesado mundo genético de los colores felinos.

Uno de los más complicados, pero muy interesantes, es el gen C, pleno de versiones mutantes que hacen nuestro panorama mucho más fascinante.

El alelo C, dominante contra todos los demás, es el gen del color "pleno", "puro o sólido". Esto significa, por ejemplo, que un gato con el gen B en el locus del color y un gen C en el locus de la intensidad será un gato negro puro, todo él, desde la punta de la nariz hasta la punta de la cola. Negro puro, sin otras marcas ni colores. En mi ejemplo, tendremos una clásica "panterita", los gatos negros de las brujas medievales.

Sus mutantes (recesivos todos en relación a C) se llaman (ordenados en orden de dominancia, del más dominante al más recesivo): c(b), c(s), c(a) y c(e).

¿Qué determina estos extraños alelos?


Acción completa de los alelos de la serie C

Si dejamos aparte el color pleno C, hacen lo siguiente:

c(b) es el gen del pelaje birmano, típico de esta raza: el pleno (por ejemplo negro) se vuelve sepia (lacre o "seal"). Los ojos, naranjas, se despigmentan parcialmente, virando al amarillo claro;

c(s) es el alelo "siamés". Si usted ha visto un siamés alguna vez, sabrá que tiene un pelaje decolorado en todo el cuerpo, excepto lo que los criadores conocen como "puntas": máscara, orejas, manos, pies, articulaciones, genitales y cola. El color del cuerpo irá del beige claro al blanco hielo y los ojos oscuros se diluirán y se verán celestes o azul intenso. El color general es termosensible: se oscurecerá en el frío y se aclarará en el clima cálido y, además, es sensible al corte: si usted corta el pelo de su gato o se lo afeita, el pelo nuevo crecerá más oscuro que el anterior. La dominancia de C sobre c(b) y c(s) es absoluta: tanto los gatos CC como los gatos Cc(b) y Cc(s) serán negros, y punto. Sin embargo, la dominancia de c(b) sobre c(s) es incompleta, lo cual quiere decir que un gato c(b)c(s) será un gato intermedio, seguramente hijo de un siamés c(s)c(s) y de un birmano c(b)c(b). Este gato tendrá un manto de color más intenso que el siamés y las marcas de las puntas aún más oscuras, pero con ojos azules verdosos. Si usted tiene un c(b)c(s) en su casa, permítame felicitarlo, porque es el feliz poseedor de lo que se llama un tonquinés.

c(a) es quien sigue en el ranking de genes dominantes de la plenitud de color. Es el gen del albinismo del pelaje, pero no de los iris de los ojos. Vaya, que hemos vuelto a encontrar a los gatos blancos de ojos azules (y sordos). El homocigota c(a)c(a) será totalmente blanco, con los ojos completamente azules (y los oídos completamente sordos). Es un alelo rarísimo, que no es completamente recesivo contra c(b) y c(s). Un c(b)c(a) será un birmano con el pelaje más claro, y un c(s)c(a) será un siamés con el pelaje pálido y diluido, o, en otras palabras, serán birmanos o siameses con albinismo incompleto en el manto (no en los ojos).

Por último, el más recesivo de todos los alelos mutantes de la familia C es c(e). Se trata del verdadero gen del albinismo completo y total, lo que dará en un gato blanco de ojos rojos. Esta condición, muy común en ratas y conejos, es muy difícil de hallar en los felinos, tanto, que se la llama "excepcional", por ser diez veces más infrecuente que el c(a) blanco de ojos azules. El pelo será blanco por ausencia de color, y los ojos, privados de melanina que da su color al iris, dejan translucir la sangre que hay detrás y por eso parecen rojos.

Si observamos un pelo de gato de la base o raíz hasta la punta, veremos que en muchos casos la base es blanca, en una zona más o menos extensa.

Este fenómeno se debe a la acción del gen del locus I (por inhibidor... inhibidor del color en la base de cada pelo, nada menos).

El gen I está o no está, por lo que sólo hay mantos I o no I. Opera de dos maneras diferentes:

Sobre un pelo normal, uniforme y de un único color (negro, azul o rojo), I produce una zona blanca en la base.

Sobre un pelo agutí (de base amarillenta, bandas alternadas amarillas y negras y punta negra), la presencia de I simplemente suprime todo lo amarillo, dejando un pelo blanco con algunas bandas negras transversales.

En pocas palabras: sobre un manto no agutí, de color uniforme, el gen I producirá mantos "smoke", para usar el término técnico de los criadores. Externamente el pelaje parece oscuro, pero, al acariciarlo o al moverse el animal, se verá un contraste entre las puntas de los pelos y la base blanca.

Sobre un manto agutí o tabby, las zonas claras se volverán plateadas, produciendo los colores "silver tabby", "silver shaded" y "chinchilla".

Ya conoce usted a los genes de tipo "simple": A, B, C, D e I.

Existen, sin embargo otros genes especiales con características especiales: dependen del sexo, o tienen efecto sobre el pelaje y otras características del gato.

Como se comprenderá, el criador de gatos, consumado genetista, está obligado a conocer perfectamente también a estos genes especiales, en orden a prever y "diseñar" con precisión el pelaje de los gatitos que se dispone a conseguir.

Cuadro general de colores comunes

Padre

Madre

Hijos machos

Hijos hembras

Negro Negro
Azul
Crema
Rojo
Escama de tortuga

Azul-crema

Negro, azul
Negro, azul
Rojo, crema
Rojo, crema
Negro, azul
Rojo, crema
Negro, azul
Rojo, crema

Negro, azul
Negro, azul
Escama de tortuga, azul-crema
Escama de tortuga, azul-crema
Negro, azul, escama de tortuga
Azul-crema
Negro, azul, escama de tortuga
Azul-crema

Azul

Negro
Azul
Rojo
Crema
Escama de tortuga

Azul-crema
Negro, azul
Azul
Rojo, crema
Crema
Negro, azul
Rojo, crema
Azul, crema
Negro, azul
Azul
Escama de tortuga, azul-crema
Azul-crema
Negro, azul, escama de tortuga,
Azul-crema
Azul, azul-crema

Rojo

Negro
Azul
Rojo
Crema
Escama de tortuga

Azul-crema
Negro, azul
Negro, azul
Rojo, crema
Rojo, crema
Negro, azul
Rojo, crema
Negro, azul
Rojo, crema
Escama de tortuga, azul-crema
Escama de tortuga, azul-crema
Rojo, crema
Rojo, crema
Rojo, crema, escama de tortuga,
Azul-crema
Rojo, crema, escama de tortuga,
Azul-crema

Crema

Negro
Azul
Rojo
Crema
Escama de tortuga

Azul-crema
Negro, azul
Azul
Rojo, crema
Crema
Negro, azul
Rojo, crema
Azul, crema
Escama de tortuga, azul-crema
Azul-crema
Rojo, crema
Crema
Rojo, crema, escama de tortuga
Azul-crema
Crema, azul-crema

Vamos a por ellos:

Los gatos atigrados o tabby son así porque llevan el gen del locus T (por "tabby"). "¿Cómo?", gritará el lector, desalentado, "¿No acaba de decir que los tabby son tabby porque llevan el gen A del agutí?".

Pero sí, lector... Sí. El gen A determina la presencia o ausencia de los dibujos tabby... El gen T determina la naturaleza de dichos dibujos... ¿Complicado? ¡Qué va...! Aún no ha leído nada...


Tabby clásico

Primera consideración: los genes del locus T no se manifiestan más que en los gatos que tienen ocupado el locus A por un gen A. Es decir: no pueden tener dibujos tabby o agutí más que los gatos tabby o agutí. Todos los gatos los tienen, pero se manifiestan sólo en la forma A+T. Los gatitos aa (homocigotas recesivos, es decir, "no agutí") presentan a veces, de muy cachorros, las marcas que se llaman "fantasmas", débiles imágenes de dibujos tabby que desaparecen a medida que el animal crece.

El locus T puede llevar varios alelos. De dominante a más recesivo mencionaremos:

T(a) o gen abisinio. El manto está casi libre de estriaduras o dibujos tabby. Cuando los hay, están limitados a patas, gola y cola. Por algún motivo, a los egipcios los enamoró este gen, e hicieron sagrados a sus portadores, momificaron sus cuerpos y le dieron la cabeza de un gato T(a) a las imágenes de la diosa Bastet.

El que sigue en orden de dominancia es el gen T (tabby mackerel, el tan común atigrado o barcino). Es el tipo salvaje original: el Felis lybica, ancestro silvestre de nuestro gato doméstico, es un gato tabby atigrado con dibujos mackerel, o sea un gato AT. Las marcas mackerel son claras y sutiles, ininterrumpidas y siempre perpendiculares al eje del cuerpo.

T(b) es un alelo que produce un dibujo espectacular: se lo llama "blotched tabby" o tabby clásico, y consiste en tres rayas longitudinales y paralelas a lo largo de la columna vertebral, un dibujo en forma de mariposa en los hombros y unas circunvoluciones en los flancos.

Hay otro tipo de tabby, el "spotted tabby" o manchado. Aún no se sabe con certeza qué alelo lo determina, pero que un spotted es un tabby modificado por poligenes T (no se asuste, ya veremos lo que son los poligenes). Otros piensan que mi escala de dominancias de los alelos T está equivocada, y que T(a) no es dominante sobre todos los demás, sino que T, en los spotted, domina parcialmente a T(a). El simpático tabby manchado sería, de demostrarse esto, entonces, un heterocigota TT(a). Aún un tercer grupo de criadores (complicados, estos muchachos, ¿no cree?) dice que hay un gen independiente, que ni siquiera forma parte de la serie T, que es responsable exclusivo del patrón spotted. Puede ser...

Lo más probable, empero, es que el carácter de spotted varíe según las particulares condiciones de configuración genética de cada raza y, dentro de ella, de cada gatito individual, todo ello mezclado y modificado por la acción de los famosos "poligenes"...

Y vayamos a explicarlos...

Los poligenes son elementos no identificados que, aislados, tienen una acción mínima o aún nula sobre el pelaje de los gatos. Si embargo, en conjunto con otros genes, pueden modificar los resultados en gran medida.

Hay poligenes que ensanchan o angostan las rayas oscuras del gato, otros que aclaran u oscurecen los colores del fondo, y también los hay que aumentan o disminuyen el contraste entre el fondo y los dibujos de rayas: los poligenes son el control remoto que controla esa pantalla que es el pelaje del gato.


Expresión del poligen "ensanchador" de rayas

De esta manera, manipulando distintos poligenes, hemos llegado a crear gatos silver shaded y de manto de chinchilla a partir de silver tabbys comunes y silvestres (el del manto chinchilla se denomina poligen ch).

Particularmente sensibles a la acción de los poligenes son los gatos que llevan el gen naranja (enseguida nos ocuparemos en profundidad de él), ya que siempre los gatos rojos o naranja son tabbys o agutí (no existen los gatos rojos uniformes o naranjas lisos).

Los poligenes son muy importantes en algunas especies de objetivo industrial: en las vacas, cambiando la presencia o proporción de ciertos poligenes obtenemos más o menos leche, leche más o menos descremada y más o menos grasa.

En los gatos, cambiamos el color de sus ojos, longitud del cabello, tipo de manto... Un verdadero comando "a distancia" para obtener el "frankenstein" felino que nuestra fantasía y refinamiento nos dicte.

Los poligenes aclaradores u oscurecedores sirven para adecuar cada ejemplar al standard de su respectiva raza: en efecto, ciertas razas exigen negros azabaches, azules pasteles, delicados lilas, rojos llameantes, etc. Si deseamos un gato de color profundo, le pondremos la mayor cantidad de poligenes oscurecedores y casi ninguno aclarador. Si queremos un crema bien rosado, echaremos en nuestra "cacerola" genética muchos poligenes aclaradores y restringiremos los otros.

Los genes para el rojo (llamados "poligenes rufus") modifican la feomelanina de nuestro gato (el pigmento amarillo, ¿recuerda?).

Los persas rojos tienen un color ígneo, que se ha logrado a través de miles de generaciones de cría selectiva para exaltar los poligenes rufus. Muchas razas de gatos (persas, abisinios, variedades golden o tabby) requieren mucho rufus, mientras que en otras (gatos plateados, humo, etc.), obviamente se preferirá prescindir de ellos, ya que el rufus hace amarillenta la base del pelo (que tendría que ser plateada), con lo que, en vez de un silver tabby, tendríamos un silver "oxidado"...

Los poligenes rufus determinan también el grado de rojo en los ojos, por lo que se añaden en los genomas de los gatos que van a tener ojos marrones o dorados, dándoles ese llameante color rojizo-cobrizo, y se evitan o se suprimen en los gatos de ojos azules o verdes por motivos obvios de estética.

Finalmente, los poligenes de contraste permiten modificar la relación entre las manchas y el color de fondo.

Pero no termina aquí: manipulando distintos grupos de poligenes puedo conseguir más manchas o menos, más extendido un color que el otro, pelo más largo o más corto, nariz más aplastada o menos, o controlar cualquier característica que se nos ocurra... Alquimia genética, ingeniería fantasiosa que viene practicándose desde hace milenios.

Pero no nos hemos olvidado de la pequeña Pandora, mi bella gata tortuga. Vamos a explicar su existencia con los conocimientos reales de la genética actual: usted es ya casi un experto, y puede prescindir de las simplificaciones para principiantes...

Todas las gatas tortuga son consecuencia del gen naranja ("orange").

Los gatos tienen 36 cromosomas, organizados en 18 pares idénticos (autosomas) y un par sexual. El gen naranja se transporta por el cromosoma X.

En un gato, el X lleva, o bien un gen naranja (XO) o bien no naranja (X). ¿Es el naranja dominante o recesivo sobre el no naranja? El caso es bien distinto de los alelos A, B, C, D, T e I que ya conocemos. El naranja es especial, en el sentido que no domina ni es dominado por el no naranja. En otras palabras, no es dominante ni recesivo. Puede tapar los efectos de otros genes, ser tapado por ellos o bien coexistir con ambos, expresándose y permitiendo que los demás también se expresen.


OW: gatito con naranja y blanco muy bien expresados

En el gato macho, que tiene un solo cromosoma X, o está presente o no lo está, es decir que el macho es o rojo o de cualquier otro color no rojo.

Sin embargo, en la hembra, que tiene dos X (y aquí va llegando mi Pandora), el rojo puede coexistir con los demás colores.

¿Qué posibilidades hay en el caso de los machos?

Que el varoncito sea XOY (gato rojo, sin colores negros o derivados del negro) o XY (gato no rojo: blanco, negro o de cualquier otro color. No tendrá ni rastro de colores rojizos o naranjas).

Las hembras podrán, entonces, ser:

XOXO: naranja homocigota. Será una gata naranja, sin colores negros, negros diluidos o mutaciones para otros colores. Es cierto que la niña podrá tener un genoma que determine otros colores, pero el XO naranja lo tapará completamente e impedirá que se exprese.

XX: ningún gen naranja. La gata será del color que determinen el resto de los genes.

XOX: un solo X naranja. La dominancia será compartida: la gata (Pandora, por caso) tendrá pelos naranja en los lugares dominados por XO y pelos de cualquier otro color, dominados por otros genes, en donde domine X, que no impedirá que el negro, blanco, etc., se expresen.

XOX será una gata tortuga, como Pandora. Los pelos naranja y no naranja podrán estar muy mezclados, como en las gatas tortuga que sólo son rojo y negro, o repartidos en amplias manchas de color, algunas naranja y otras de otros colores, como suele suceder en la gatas tortuga con blanco (el caso de mi Pandora). La diferencia entre una gata muy mezclada y una gata muy manchada (con blanco) viene dado por diferentes hábitos migratorios de los melanocitos durante la vida embrionaria.

¿Cuáles son las interacciones del gen XO con los demás genes que hemos visto? ¿Interactúan, en primer lugar?

La respuesta es: a veces...

Los alelos del locus A (agutí) no tienen efecto sobre el gen naranja XO. Todo lo contrario: el agutí tiene pelos a bandas naranja amarillento y negro, como hemos visto. Sabemos ahora que el XO transforma toda la eumelanina (negra) en feomelanina (naranja), de modo que si coexisten un XO con un A nos dará un gato rojo uniforme.

Interacciones completas del agutí con los demás alelos (B, C, D , T y O)

Con respecto a los alelos del tabby (T), que normalmente sólo están presentes en los sujetos agutí, siempre se encuentran en los ejemplares rojos. T produce sobre XO variaciones en la intensidad del rojo, dando como resultado dibujos rojo intenso sobre fondo naranja más claro. Como el no agutí actúa sólo sobre los gatos no naranja, es difícil saber si un gato rojo hubiese sido agutí o no (es decir: si genéticamente lo es).

En el caso de las gatas tortuga, en cambio, el agutí o no agutí se expresará en las partes no rojas: Pandora, por ejemplo, fuera de los parches rojos, tiene grandes sectores blancos y manchas gris oscuro. Esta últimas llevan atigraduras negras sobre el fondo grisáceo. Por tanto, podemos decir con certeza que Pandorita lleva genotipo XOATW (la W es el gen que produjo los sectores blancos, A y T le dieron el agutí con rayado tabby y XO sus parches rojos).

Con respecto a la interacción XO-B, podemos decir que O es completamente epistático de B. En palabras simples, el rojo oculta completamente al negro o marrón, y el gato no tiene ni rastros de ellos. Es por eso que no podemos saber qué alelo B tiene en su genotipo un gato rojo, es decir, si iba a ser negro, marrón o beige claro.

La serie C puede modificar parcialmente al gen rojo O: hay gatos totalmente rojos OC, pero también con rojos de patrón birmano Oc(b) que se llaman birmanos redpoint y siameses rojos (llamados colourpoint red) Oc(s).

El alelo D es capaz de diluir el rojo como diluye al negro: los gatos XOD se llaman "crema".

Si el inhibidor I influye sobre O, el gato "naranja humo" resultante se denominará, equivalente al smoke, red smoke; el chinchilla será "red shell"; el del silver shaded será "shaded cameo" y así ad astra et ad infinitum... Todas estas variedades presentan versiones diluidas al color crema.

¿Y las partes blancas de las gatas tortuga?

El gen W (blanco) es modificado por los genes del locus S. Si está presente S, la tortuga tendrá manchas blancas (la "S" es de "spotted", manchado). Si no hay un S, la gata será s (sin manchas, tipo salvaje).

El estudio de los sectores blancos en los gatos, por sí solo, justificaría un artículo aún más extenso que éste, por lo que nos detendremos aquí por piedad hacia el sufrido lector.

Los colores posibles de gatas tortuga (y en esto tomaremos como parámetro el standard del persa, que se supone incluye todos los existentes) son:

Tortuga: pelaje claro y oscuro (rojo y negro), en manchas distribuidas regularmente en todo el cuerpo y las extremidades. Si se trata de una persa, es deseable una mancha roja en el rostro. La nariz y las almohadillas de las patas son negras, rosa o a manchas rosas y negras. Los ojos serán naranja oscuro o cobre. Ésta es la variedad tortuga "clásica", diríamos.

Tortuga chocolate: variedad de la anterior, donde en lugar de rojo y negro la gata es roja y chocolate con negro.

Tortuga lila: otra variante del tortuga, en que el lila reemplaza al rojo y el crema al negro.

Tortuga azul crema: preciosa mezcla de azul (en lugar del negro) y crema pálido (dilución del rojo) en todo el cuerpo y los miembros. Las almohadillas serán azul, rosa, o a manchas de ambos colores. Los ojos, naranja oscuros o cobreados, como en la variedad clásica.


Carey con predominio del gen W (arlequín)

Tortuga con blanco, carey o calicó: El patrón tortuga carey, también llamado calicó, tiene los colores rojo y negro en grandes manchas, muy bien definidas y separadas del blanco, que se extienden sobre todo el cuerpo. El color no puede superar 2/3 de la superficie corporal ni ser menor de 1/2 (standard del persa): el resto del manto será blanco. Los colores son cálidos y brillantes, y es deseable una mancha blanca en forma de llama en el hocico. La nariz es rosa, negra o rosa y negra, al igual que las almohadillas, mientras que los ojos son naranja oscuro o cobrizos.

Tortuga azul y blanco: variedad del carey, donde el negro ha sido sustituido por el azul y el rojo por su dilución crema.

Tortuga chocolate y blanco: segunda variación posible del carey, donde las manchas negras han sido sustituidas por manchas color chocolate con leche.


Una hembra carey

Tortuga lila y blanco: tercera variación carey, en la cual las manchas rojas son reemplazadas por lila y las negras por crema pálido. Ésta versión y las dos anteriores, si el gato es persa, deben respetar las proporciones ya enunciadas para el carey.

Tortuga arlequín y blanco: Es igual al tortuga carey, excepto en un aspecto. Las manchas rojas y negras, en lugar de ocupar entre 2/3 y 1/2 de la superficie corporal, cubren sólo entre 1/2 y 1/4 El arlequín es, pues, una tortuga carey donde predomina el blanco en lugar de los colores. He aquí a mi Pandora...

Tortuga arlequín azul y blanco: con azul en lugar de negro.

Tortuga arlequín chocolate y blanco: con chocolate con leche.

Tortuga arlequín lila y blanco: con lila en lugar del rojo.

Tortuga Van: Las gatas tortuga Van tienen dos manchas rojo y negro sobre la cara, separadas por una mancha negra. Toman su nombre de la raza turca Van, en la que esta configuración es muy común. Las gatas tortuga Van tienen un mancha negra o roja que ocupa desde la punta de la cola hasta la mitad de los cuartos traseros. Las manchas de color, si la gata es persa, no pueden contener pelos blancos so pena de penalización. Si tienen manchas irregulares, estas sólo pueden ser muy pequeñas (si su gata quiere competir) y nunca ser más de tres entre cuerpo y patas. El pecho y el vientre son de un blanco inmaculado. Es preferible que las orejas sean blancas con el interior rosado, aunque pueden ser de cualquier color.

Tortuga Van azul y blanco: igual que en el calicó y el arlequín.

Tortuga Van chocolate y blanco: Ídem.

Tortuga Van lila y blanco: Íd.

En los gatos de diseño, creados en criaderos por expertos criadores, es bastante fácil determinar la composición genética de cada pelaje, aún de los más complejos patrones tortuga.

En cambio, en los gatos callejeros, esto es muy difícil, si no imposible. Es que en los animales vagabundos, los gatitos de una misma camada son, normalmente, hijos de distintos padres. El momento de la fecundación se desarrolla como una (¿cómo decirlo?) "orgía felina", donde la hembra es montada sucesivamente por varios machos. Los gatitos, de este modo, tienen todos la misma madre, pero uno o varios pueden ser hijos de distintos padres, y comúnmente lo son.

"¡Yo he visto un gato tortuga que era macho!", me ha dicho alguien una vez...

Hmmmm... puede ser. Puede ser...

Hay en los anales de los criadores, unos dos mil gatos machos de patrón tortuga. Sólo dos mil en toda la historia de la felinofilia.

Mas ¿cómo puede ser esto, si sabemos que para que se exprese el tortuga son necesarios dos cromosomas X, y el macho sólo tiene un X y una Y?

Lo que sucede es, que en casos muy raros, un gato macho puede tener lo que se denomina en lenguaje técnico "mosaicismo sexual". En el ser humano se han descripto casos de hombres excepcionalmente afeminados que tenían, en vez del XY normal, una fórmula gonosómica de doble X (XXY) o aún triple XXXY. Del mismo modo, muchas mujeres muy masculinizadas portan mosaicos XXYY. Algunos asesinos sexuales, homicidas múltiples, o sátiros o violadores reincidentes y obsesos sexuales son víctimas de configuraciones XYY, XYYY o XYYYY. En lenguaje genético se los llama "supermachos". También existen las "superhembras" XXX ó XXXX.

En los gatos, se han descripto configuraciones XXX, XXYY y XXXY. En el primer caso serán hembras, en los dos segundos, machos. Y si las X portan el gen XO en el locus naranja, es posible que se produzca el rarísimo caso de... ¡un gato macho tortuga!

Dada la anormal conformación de sus cromosomas sexuales, estos gatos no pueden producir espermatozoides normales y, por consiguiente, son estériles.

Sin embargo, si usted me dijera "yo he visto un gato macho, tortuga y fértil", ahí sí que yo lo tildaría de mentiroso.

¿Puede existir ese gato? Sí. ¿Es probable que usted o yo veamos uno? No, definitivamente. Si bien ha habido machos tortuga reproductivos, en toda la Historia de la Humanidad se han dado sólo... ¡siete casos! El gato doméstico vive entre nosotros desde hace siete mil años, así que la frecuencia de aparición de gatos machos tortuga con capacidad de reproducirse es de uno por milenio. De la crucifixión de Cristo hasta hoy han nacido sólo dos, y desde la victoria de Ramsés II en la batalla de Qadesh, sólo tres o cuatro. No espero ver ese extraño fenómeno en mi vida. Usted tampoco contenga la respiración esperando encontrar uno...

Yo, por mi parte, me conformo con observar la belleza y la alegría de Pandora, mi gata tortuga arlequín y blanco.

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