2/Nov/03 Luz infrarroja ayuda a cicatrizar, pero nadie sabe el porqué La cantidad de estudios clínicos realizados hasta el momento les permite a los médicos afirmar que la terapia de luz infrarroja contribuye al proceso de cicatrización. Lo que nadie puede decir con certeza, sin embargo, es por qué. (Wired News) En esto, los científicos y los médicos concuerdan: los diminutos destellos de luz infrarroja pueden ayudar a cicatrizar heridas, a generar masa muscular, a revertir los efectos más devastadores de la diabetes y reparar los ojos que ya no ven. Pero en lo que no logran ponerse de acuerdo es, antes que nada, en por qué se producen todos estos efectos aparentemente milagrosos. Durante más de una década, los investigadores han estado estudiando cómo los diodos emisores de luz, o LEDs -minúsculas lamparitas ultraeficientes como las que se ven en los relojes digitales y los controles remoto de televisión- podrían contribuir al proceso de recuperación de los tejidos. La NASA, el Pentágono y decenas de hospitales han participado de estos estudios clínicos. Las empresas han vendido zappers de LEDs comerciales a geriátricos y consultorios médicos. Las revistas y la televisión se ocuparon del tema en su momento. El sistema Medicare incluso ha aprobado algunos tratamientos con LEDs. A pesar de todo ese esfuerzo, "no hay una clara idea de cómo funciona. Solamente hay hipótesis de trabajo", señaló Marti Jett, jefa del departamento de patología molecular del Walter Reed Army Institute of Research (Instituto de Investigaciones del Ejército Walter Reed). Una de las posibilidades es la propuesta por el Dr. Harry Whelan, colega de Jett y profesor de neurología del Medical College of Wisconsin. En un estudio realizado en el 2002 y respaldado por los National Institutes of Health (Institutos Nacionales de Salud) y el programa Persistence in Combat (Persistencia en el combate) de la división de investigación del Pentágono, Whelan usó LEDs para recuperar la visión de ratas que habían sido dejadas ciegas, utilizando dosis tóxicas de metanol para dañar sus retinas. Pero tras la exposición a pequeñísimos destellos de luz infrarroja, hasta el 95 por ciento de las lesiones se repararon. En los estudios en humanos se obtuvieron resultados no tan deslumbrantes, pero que de todas formas indican un nivel de efectividad increíblemente alto. Utilizando un aparato de LEDs de mano aprobado por la FDA (Food and Drug Administration, Administración de Drogas y Alimentos) jocosamente denominado Warp 10 por tener un estilo similar al de los equipos de Viaje a las Estrellas el tiempo de cicatrización fue reducido a la mitad a bordo del USS Salt Lake City, un submarino nuclear. Los destellos de estos diodos mejoraron en más de un 40 por ciento la cicatrización de las heridas que sufrieron los SEALs de la Marina durante su entrenamiento. Y un prototipo del Warp 10 fue utilizado por unidades de las Fuerzas Especiales de los Estados Unidos en Irak, asegura Whelan. Estos LEDs originariamente fueron desarrollados por la NASA para estimular el crecimiento de las plantas. Ahora, esa organización quiere utilizar estos dispositivos para generar masa muscular en los astronautas durante el tiempo que están expuestos a gravedad cero. La síntesis de ADN de las células musculares se quintuplicó tras una sola aplicación de destellos de luz de LEDs en longitudes de onda de 680, 730 y 880 nanómetros, según lo señalado por Whelan. Cómo sucedió exactamente todo esto continúa siendo un misterio, señaló Jett, quien ha identificado más de veinte genes que por lo general son asociados con las lesiones de retina, por ejemplo, y "los LEDs los alteran a todos". "Algunos aumentaron, otros disminuyeron agregó. Pero todos volvieron a la normalidad." ¿Por qué? Whelan cree que los pulsos de los LEDs le brindan a las células de la retina una dosis extra de energía, lo cual les permite lograr una cicatrización más rápida. En circunstancias normales, las mitocondrias los motores de la célula convierten los azúcares en energía. Para ello, requieren de la ayuda de una enzima, la citocromo oxidasa, que transporta los electrones durante el proceso de transferencia de energía. La teoría de Whelan es que las partículas de luz de los LEDs les brindan a la citocromo oxidasa los electrones que normalmente obtendría a partir del azúcar. La luz se convierte en un sustituto del alimento, básicamente. Dale Bertwell, fundador de Anodyne Therapy, una empresa de Tampa, Florida, dedicada a la fabricación de dispositivos médicos basados en LEDs, no está de acuerdo con esa explicación. "Las mitocondrias de ninguna manera explican los efectos" de los LEDs señaló. Si Whelan tiene razón, las heridas se podrían curar simplemente "comiendo un caramelo más". Y, lo que es más: los US$ 1,2 millones que dicha rama del Pentágono, la DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency, Agencia de Proyectos de Investigación de Defensa de Avanzada) acaba de invertir en el trabajo de Whelan es dinero tirado a la calle, agregó Bertwell. "Están financiando el trabajo de Harry para construir algo que ya es de uso masivo", señaló Bertwell. Ese algo de uso masivo, señaló Bertwell, es un zapper de LEDs monocromático, del tamaño de una billetera, creado por Anodyne. Life Care Centers of America, una cadena de geriátricos de los EE.UU., ha comprado casi doscientos de estos dispositivos, que fueron aprobados por Medicare el año pasado. Gentiva Health Services, un proveedor de insumos médicos para atención en el hogar, encargó otros veinticinco. Estos dispositivos se están comercializando como antídoto tal vez el, primero contra la neuropatía diabética, un atrofiamiento de las pequeñas terminaciones nerviosas de las extremidades del cuerpo. Este síndrome es señalado como el culpable de la gran mayoría de las amputaciones diabéticas. Como consecuencia de todo el azúcar que hay en la sangre de la persona diabética, las terminales nerviosas se debilitan. Los pulsos de luz de estos diodos combaten esto separando momentáneamente el óxido nítrico de la hemoglobina, la proteína de los glóbulos rojos responsable del transporte de oxígeno, asegura Bertwell. El óxido nítrico es un vasodilatador una sustancia que hace que los vasos sanguíneos aumenten su diámetro. Eso, a su vez, estimula el flujo sanguíneo, lo cual hace que los nervios se revitalicen y vuelvan a crecer. El Dr. Joseph Prendergast, un endocrinólogo de Redwood City, California, ha utilizado la terapia de LEDs en más de 200 pacientes con neuropatía diabética. Luego de diez sesiones de tratamiento de 40 minutos cada una, el 95 por ciento de esas personas recuperaron parte de la sensibilidad en sus pies. Casi las dos terceras partes de estos pacientes retornaron por completo a la normalidad, señaló Prendergast. Pero, cuando se le preguntó a qué se deben semejantes resultados, Prendergast dijo: "Simplemente mejora; es lo único que le puedo decir". El Dr. David Margolis, profesor de pediatría del Medical College of Wisconsin, expresó sentimientos similares. Él y Whelan son parte de un estudio clínico que está siendo llevado adelante en siete hospitales a fin de determinar si los LEDs pueden atenuar uno de los efectos más desagradables de la quimioterapia, llamado mucositis. Esta afección consiste básicamente en una inflamación del tubo digestivo, lo cual trae aparejada la aparición de aftas en boca y garganta. En un estudio anterior, se observó que luego de un tratamiento diario con un sistema de LEDs de 670 nanómetros, la incidencia de mucositis en los receptores de trasplantes de médula ósea se redujo a un 58 por ciento, mientras que el porcentaje previsto en estos casos es del 70 al 90 por ciento. El estudio del que está participando Margolis comenzó hace muy poco, con lo cual todavía no está en condiciones de elaborar ninguna conclusión definitiva. "Pero a los que estamos trabajando en sala los médicos y las enfermeras nos da la impresión de que los pacientes que están recibiendo el tratamiento con luz tienen una cantidad significativamente inferior de aftas", señaló Margolis. Ahora, de por qué sucedía eso, no tenía "ni la menor idea". "Es mi primera incursión en (el campo del tratamiento con) luz", señaló. |